Definición de BID

El Banco Interamericano de Desarrollo es conocido en el marco mundial por sus siglas BID y tiene su sede central en Washington DC. Fue fundada en 1959 por la iniciativa de la Organización de Estados Americanos y sus recursos económicos provienen de capital público y privado. El principal objetivo de esta entidad es promover el desarrollo social sostenible de América Latina y el Caribe.

En la actualidad, un total de 48 naciones están integradas en el BID. Los países miembros se dividen en dos grupos: los países beneficiarios de América Latina y el Caribe y aquellos países que participan en la financiación de los distintos proyectos de la entidad. El BID presenta dos ramificaciones: la Corporación Interamericana de Inversiones y el Fondo Multilateral de Inversiones.

Ámbitos de actuación

Desde sus orígenes esta institución ha impulsado políticas de desarrollo diversas. Entre ellas, podemos destacar los siguientes:

– Inversiones destinadas a mejorar las infraestructuras.

– Proyectos educativos, sanitarios y medioambientales.

– Facilitar el acceso a las nuevas tecnologías y a la innovación.

– Promover asistencia técnica en sectores estratégicos.

– Desarrollar programas para reducir los índices de pobreza y la exclusión social.

– Impulsar el comercio y las inversiones con fines sociales.

En síntesis, el BID impulsa el desarrollo económico y social de América Latina y el Caribe a través de inversiones en el sector público y en el privado. Para ello establece alianzas con instituciones financieras locales de la región.

Para promover los proyectos el BID pone en marcha un sistema de licitación

Empresas e instituciones pueden solicitar financiación al BID presentando proyectos. En este tipo de solicitudes las entidades presentan sus planes de actuación y tras la recepción de estas propuestas el BID realiza la correspondiente resolución del concurso.

Uno de los retos del BID es mejorar el potencial económico de las grandes ciudades de América Latina y el Caribe

Las grandes urbes de la región se encuentran en una situación de crisis general. En muchas de ellas hay altos niveles de contaminación, problemas graves de seguridad ciudadana, bolsas de pobreza, carencias en las infraestructuras básicas, etc. Ciudades que antaño fueron un potente motor económico, en la actualidad se han convertido en espacios empobrecidos, peligrosos y con un crecimiento económico desordenado.

Fotos: Fotolia – Sirikornt / Doomu