Definición de Condena

Cuando alguien comete un ilícito y la justicia interviene conforme encontrando a esa persona culpable del mismo se dictará una condena, que consiste en el castigo concreto que impone la ley para la comisión de ese delito. Es decir, alguien mata a una persona y si la ley establece que el castigo para ese acto es de 10 a 25 años de prisión, la condena oscilará en ese lapso.

En tanto, destacamos que el concepto se aplica también para designar a la sentencia de la justicia que contiene una pena dada y asimismo a la extensión del castigo.

Las condenas judiciales son dictadas únicamente por autoridades competentes como son los jueces y tribunales y siempre se dictan al final del proceso judicial, poniéndole por caso punto final al mismo.

Afortunadamente existen las condenas ya que gracias a ellas es que la justicia va sentando precedentes de los casos que atiende, y entonces, más allá de lo que la ley, la normativa vigente impone per se para una conducta desviada, el conocimiento de las posibles condenas para tal o cual caso actúa muchas veces como método inhibitorio de cometer delitos.

También en el lenguaje corriente se utiliza la palabra condena a la hora de rechazar o de condenar determinadas acciones, dichos, que se consideran contrarios a la moral y las buenas costumbres. O sea, todo cuanto se haga o diga y que sea absolutamente censurable y desagradable por la mayor parte de la sociedad porque contraría como ya dijimos algún valor moral recibirá una condena de justamente la comunidad en la cual habita.

Las condenas de este tipo, que suelen denominarse condenas sociales, son tan o más efectivas que aquellas que emanan de la propia justicia ya que no hay nada más tremendo que el rechazo popular masivo. Por ejemplo, tal acción podrá dejar a la persona condenada por la sociedad afuera del circuito social, sin trabajo, sin oportunidades y también con un amplio rechazo de todos que terminará por afectar el desarrollo normal de su vida.
Hay condenas sociales de las cuales muchas personas jamás pueden volver ni recuperarse.