Front-End y Back-End - Definición, Concepto y Qué es
Periodista esp. e investigador
A los profanos en materia de programación, les puede parecer que desarrollar un software es una tarea bastante lineal y que solamente requiere de conocimientos de programación y, como mucho, coordinar a un equipo de desarrolladores si la aplicación es muy grande.
Pero no, no es así, y en la creación de programas informáticos entran varios conocimientos en juego, principalmente la programación de las funcionalidades por un lado y la interfaz de uso por el otro, que son las partes más básicas de toda aplicación.
Esto nos lleva a la diferenciación de dos capas distintas que trabajan conjuntamente: el front-end y el back-end
El front-end abarca todo aquello que se refiere a la interfaz de usuario y la usabilidad de la aplicación
Ello requiere conocimientos que van más allá del correcto uso de los lenguajes de programación, como los que corresponden a la usabilidad, y estudios totalmente distintos a los algoritmos y sesudos cálculos que puede incorporar una aplicación para trabajar con los datos.
El front-end recogerá las entradas e instrucciones que le proporciona el usuario a través de los controles y áreas que el mismo front-end habilita y, eventualmente, realiza una preparación de su formato para enviarlos al motor del programa, que sería
El back-end procesa las interacciones del usuario (que le pasa el front-end) con los datos, y realiza todos los procesos con estos últimos
Esta parte es la que dota realmente de funcionalidad al programa, aunque sin el front-end no nos serviría de nada pues no podríamos interactuar con los datos y sus resultados.
Es en esta parte donde subyacen todos los algoritmos que realizan el trabajo “bruto” del sistema, la manipulación de los datos y desarrollan sus funcionalidades.
En ocasiones el front-end y el back-end se ejecutan separadamente en distintas computadoras, interoperando a través de la red
Es en estas ocasiones en las que los desarrolladores del software deben tener en cuenta cuestiones de concurrencia, es decir, que dos o más usuarios puedan trabajar simultáneamente sin molestarse los unos a los otros, controlando sus acciones e impidiendo que puedan modificar simultáneamente un mismo dato que no soporta la modificación concurrente.
Las aplicaciones web son el paradigma perfecto de este modelo, ya que se pueden ejecutar desde cualquier parte, y su front-end no es más que código HTML que utiliza cualquier navegador web para su ejecución.
Fotos: Fotolia – Matador / Dusit_sri
Trabajo publicado en: Feb., 2017.
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