Definición de Olmeca

La palabra olmeca se utiliza para designar a una de las más significativas civilizaciones precolombinas que tomó lugar en América. Los olmecas se ubicaron en el actual territorio de México, por lo cual fueron vecinos de otras importantes culturas como la maya y la azteca. A diferencia de lo que se piensa normalmente, los olmecas no coexistieron con los españoles ya que su período de esplendor tomó lugar entre los años 1200 y 400 a. C., por lo que los europeos descubrieron de su existencia pasada sólo a través de documentos y obras de arte que perduraron en el tiempo.

Los olmecas se emplazaron en las costas del actual Golfo de México, aunque también llegaron a adentrarse bastante en el territorio y a expandir su cultura por una parte importante de la geografía mexicana. Algunos de los centros urbanos olmecas más importantes fueron las ciudades de Tlatilco, Tlapacoya, Teopantecuanitlan y Chalcatzingo, entre otras.

Debido a la existencia de muy pocos documentos escritos, hoy en día se cuenta con escasa información sobre el estilo de vida de los olmecas. Sin embargo, se considera que la olmeca era una civilización jerárquica en la que algunos recursos eran un privilegio de los más ricos, así como también gran parte de las construcciones pertenecientes a esta civilización demuestran mayor poder de ciertos grupos sociales sobre otros. Al mismo tiempo, los expertos han encontrado numerosos objetos y elementos con el típico diseño olmeca a lo largo de gran parte del territorio mexicano, lo cual hace suponer que esta cultura se dedicaba al comercio e intercambio de bienes.

Entre los elementos que más resaltan de la cultura olmeca encontramos sin duda alguna a las gigantescas y fabulosas cabezas que han sido talladas en piedra, probablemente, en honor a dioses o figuras importantes para los olmecas. Se estima que cada una de estas cabezas representa a un personaje o figura distinta ya que no se han encontrado dos modelos iguales en todo el territorio. Además, los olmecas también crearon importantes y bellísimas máscaras hechas en jade. Los olmecas, finalmente, eran politeístas y creían en un conjunto específico de dioses y chamanes.