Definición de Contrato de Amistad

La amistad es una relación afectiva estrecha entre dos personas. Es un sentimiento mutuo de empatía, afecto y respeto. El concepto de amistad es universal y todas las culturas lo utilizan. En cada época, la amistad ha tenido sus peculiaridades, aunque el concepto general se mantiene inalterable.

Para los griegos del mundo antiguo, la amistad se daba sólo entre los hombres, ya que había un sentimiento de unión entre ellos en los momentos previos a la batalla. Cada época ha incorporado algún matiz a este concepto. Por ejemplo, en la Edad Media no se contemplaba la amistad entre dos personas de una diferente clase social. Incluso en la actualidad sigue habiendo un debate: ¿ es posible la amistad entre un hombre y una mujer ?

Al tratarse de un sentimiento, la amistad no tiene propiamente un documento que la acredite ( como sí sucede con la relación de propiedad, por ejemplo ). Y precisamente por no existir este documento, algunos amigos lo crean a modo de pacto. Es un documento que no pretende tener una validez legal, es simplemente una manera de expresar afecto y compromiso. Los amigos que acuerdan un contrato, desarrollan una serie de acuerdos compartidos y finalmente firman el documento para reforzar sus buenas intenciones.

Es un contrato muy relacionado con el mundo adolescente, periodo en el que las pasiones son más intensas y todo se vive con gran emotividad. La idea principal de un contrato de amistad es expresar la lealtad de los dos amigos, dando a entender que es un sentimiento profundo y verdadero.

Hay otro sentido del Contrato de Amistad es el utilizado en la estrategia comercial de algunas marcas para fidelizar a sus clientes. A través del mismo, una marca intenta vincular al posible cliente, para que éste goce de una serie de ventajas. Esta modalidad es propia de las entidades que se dedican a promover relaciones sentimentales, ampliar el círculo de amigos y crear vínculos entre ellos.

Los contratos de amistad en cualquiera de sus modalidades pueden renovarse en una fecha determinada, manifestándose así que la voluntad originaria se pretende mantener.