Qué es Detentar

Se dice que alguien detenta el poder cuando su función de mando se ha obtenido de forma ilegítima. Por lo tanto, el verbo detentar hace referencia a una acción contraria a la ley.

El uso del término en el ámbito de la política

Si un individuo se presenta como candidato a un cargo público y es elegido democráticamente por los ciudadanos, se dirá que tiene un cargo determinado (por ejemplo, la alcaldía de un municipio). En situaciones de normalidad política, un alcalde, un diputado o un senador tienen un cargo y, por lo tanto, su representación es totalmente legítima. En ocasiones excepcionales, los cargos de representación se obtienen por el uso de la fuerza, por ejemplo a través de un golpe militar o un proceso revolucionario. Cuando esto sucede el cargo de representación se detenta y no se tiene.

Así, quien detenta un cargo político lo hace de manera irregular desde el punto de vista de la legalidad. Sin embargo, esto no quiere decir que en todos los casos detentar el poder sea una cuestión moralmente rechazable, ya que en algunas circunstancias las motivaciones políticas para alcanzar el poder de manera irregular pueden estar plenamente justificadas. En conclusión, detentar el poder está asociado a una ilegalidad pero no necesariamente a una inmoralidad.

Detentar y ostentar

Estos dos verbos en ocasiones se emplean incorrectamente y se presentan como sinónimos cuando en realidad tienen significados diferentes. Ya hemos visto que detentar implica poseer un cargo o un reconocimiento de forma ilegítima, lo cual no tiene nada que ver con el verbo ostentar. De hecho, ostentar un cargo expresa que la posesión de la representación es considerada un honor o un privilegio. Por lo tanto, no se debe decir que «una minoría ostenta el poder» o que «el diputado ostenta su cargo durante cuatro años».

Hay que tener en cuenta que ostentar es sinónimo de alardear o presumir y, por lo tanto, se emplea este verbo adecuadamente cuando de manera legítima se tiene un sentimiento de orgullo por haber conseguido algo.

Podría decirse que «la selección brasileña ostenta cinco campeonatos mundiales» porque el orgullo y la satisfacción que se expresa en la oración están justificados totalmente, ya que se trata de una afirmación cierta y no de ninguna exageración.

Verbos que se confunden con cierta frecuencia

La confusión entre detentar y ostentar nos recuerda que otros verbos también generan algunas dudas y confusiones. Esto es lo que sucede con los siguientes pares de verbos: aprender y aprehender, desecar y disecar, ratificar y rectificar, infligir e infringir, entre otros ejemplos.

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